miércoles, agosto 12, 2015

El hombre azul y la hija de los divorcios


Cuando yo tenía dos años y medio, y mi hermana cuatro, mis viejos se separaron. Virtualmente, tengo un solo recuerdo de mis viejos juntos. Estábamos mi hermana, mis viejos y yo en el depto donde vivíamos, tomando helado sentados en el piso del balcón. Me acuerdo que hacía calor, mucho calor, y yo estaba sentada en las rodillas de mi viejo, tomando mi helado. Es el único recuerdo que tengo de mis padres juntos. Después recuerdo peleas en eventos aislados (como actos de la escuela y cosas así) en los que debían juntarse sí o sí por causa de fuerza mayor (o sea, nosotras). Pero nada más. El resto de mis recuerdos infantiles son dicotómicos: o con mamá, o con papá.

Mis tíos también son separados. De hecho, mis abuelos también. Mi historia familiar es la de hombre y mujeres demasiado apasionados con el sexo opuesto como para dedicarle toda su vida a una misma persona. O demasiado celosos como para aguantar indiscreciones.

Es por eso que creo que nadie puede culparme si no puedo creer en el amor para toda la vida. Es por eso que todavía tengo miedo por Nacho y yo. Nunca he presenciado un amor eterno, un amor de esos corte "hasta que la muerte nos separe". Mi experiencia (la de mi familia, y la mía personal) es que eso no sucede.

Esto no quita que yo no sea una Susanita más. Creo que, justamente, debido al divorcio de mis viejos y mi crianza bipolar, siempre anhelé desde lo más profundo de mis sueños encontrar al hombre ideal, indicado, the one for me. Porque nunca dudé de querer tener hijos. Pero siempre estuve convencida de que no quería criarlos en divorcio. ¿Y cómo lograrlo? ¿Cómo creer en el amor para toda la vida, si nunca lo vi? ¿Acaso es posible que encuentre a, sino mi príncipe, mi hombre azul?

Ese sueño perseguí durante mucho tiempo. Me enrosqué en relaciones con tipos complicados a quienes yo les "hacía bien". Les daba serenidad, paz, buen sexo, qué sé yo qué querían decir con "me hacés bien". No era el bien de Drexler. Era un bien de "estoy del orto, soy un hemipléjico emocional y tu amor me muestra que no todo es una mierda". Lo cual, por si no lo notaron, tampoco quiere decir "te quiero". Más bien, "sos una buena enfermera".

Finalmente me cansé, y después de escuchar al tercer tipo (¡el tercero!) decírmelo, lo dejé y renuncié. Quizás era cierto eso de que no existe el amor para siempre. Quizás yo no sepa elegirlos, o simplemente sean todos iguales. En cualquier caso, renuncié a mi sueño de Susanita. No estoy hecha para esto. No estoy hecha para el amor, si el amor es enfermería a domicilio.

Así estaba cuando lo conocí a Nacho. Llevaba un tres años de soltería crónica, salpimentada con relaciones hemipléjicas y algunos compañeros de sábanas en soledad. No estaba de novia, ni en pareja, ni me interesaba. El amor llegaría, o no, pero yo no pensaba buscarlo. Y nos enamoramos en el cumpleaños de un amigo en común.

Pero aún tengo miedo. Creo que el sueño de Susanita nunca se realiza, hasta la muerte. Sólo hay un momento en el que sabés que estarán juntos hasta la muerte, y es la muerte misma. En el camino, en la vida, nunca podré estar segura de que estaremos juntos para siempre. Creo que he pasado por demasiadas roturas de corazón como para volver a creer que ese sueño es real. Pero eso no me impide seguir intentándolo. Intentar un camino junto al hombre que amo, y vivir con él todas mis seguridades de amor y mis dudas heredadas.

Aunque creo que si Nacho leyera esto me costaría mucho hacerle entender por qué, a pesar de todo lo dicho, despertarme todas las mañanas al lado suyo es la mayor felicidad de mi vida.

8 comentarios:

Carolina_USMLE dijo...

La unica forma de averiguarlo es intentando...
El amor eterno puede q exista...no creo q te debas marcar por el hecho de venir de una flia divorciada...mis abuelos no eran divorciados, ni mis viejos...pero yo siempre tendre la duda de si voy a ser feliz para toda la vida...si va a haber amor "hasta q la muerte nos separe"..
Nadie sabe...pero como todo en la vida, hay q tomar el riesgo.

BLUEKITTY dijo...

Creo que no debés tener miedo (mira quién habla). Entiendo todo lo que decís pero día a día aprendo que el amor no es eternamemte mágico sino que dos personas que se amen puede lograr que dure... y ese para siempre mmm no sé, a veces pienso que le digo a mi chico que lo voy a amar siempre, mucho, siempre dentro de ese período que dure. No sé si dure la eternidad, pero dentro de lo que dure lo voy amar, suena fácil. Quiero estar con él por siempre, pero hay días que cuesta tanto y que sería tan fácil mandarlo a la mierda y todas sus cosas que me molestan, luego recuerdo lo que me hace sentir, suspiro, me trago algunas cositas pequeñas (las grandes hay que hablarlas) y perdono, dejo pasar, acepto, entiendo, amo. Creo que él también hace eso por mí y así los segundos, horas, días, semanas, meses y años pasan juntos. Trato que día a día demostrarle esa eternidad.

Anónimo dijo...

Empíricamente comprobado, está el hecho de que en las familias en donde las cabezas se separan, luego se la historia se repite en generaciones posteriores.

Pero siempre hay excepciones y no podés, ni debés permitir que ésto te condicione.

De ser así, sugiero te sientes en el diván para que te ayuden a abrir cabeza y alma.

Dejate fluir.

extraterrestre musical dijo...

hola! no me acuerdo como llegué acá pero llegué justo para opinar sobre esto...
em..digamos que no deberias pensar tanto, la gente se toma la vida demasiado enserio y no logra vivirla, te doy mi consejo por experiencia, es un consejo no una receta por eso se toma o se deja...pero, vivi el presente, no vivas del pasado ni trates de vivir el futuro porque eso es imposible hoy, pero estaria bueno que disfrutes cada minuto con nacho, porque se nota que lo amas y eso tambien te provoca miedo, porque es un sentimiento que te ha frustrado alguna vez..(todo esto es por experiencia propia).
Mi lady, vive el momento y vas a ver que todo fluye de otra manera...vivi tu vida no la de tu familia, y eso es un buen paso, para amar como vos deseas no como ellos te lo enseñaron.
por el gran cambio, un gran abrazo!
anivlis :)

Erotomano dijo...

Lindo lugar este...!
Volvere.

Pedro B. dijo...

Relajate y goza linda! :D

Anónimo dijo...

UF! no sabes como te entiemdo, mis viejos se separaron cdo yo tenia 23, justo cdo pense que eso ya no pasaria! para entonces yo ya estaba en pareja y eso me hizo clic en mi cabeza, incluso cambio mi manera de ver mi propia relación. Hoy seguimos juntos y se q HOY es lo mejor q me puede pasar, lo amo, es mi todo, el y mi hijo forman mi universo, pero lamentablemente ya no lo pienso como eterno, sino como una hermosa circunstancia, lo unico q en mi vida es absoluto es mi tesorito de casi tres años, el resto, los golpes de la vida me enseñaron, todo es relativo... por tu post sobre las pelis de disney dedusco q crecimos en la misma epoca mas o menos, y me parece muy triste que nuestra generacion piense asi, pero bueno, q se lo replanteen nuestros padres ¿no?

Lolita y El Profesor dijo...

Tengo buenas noticias para usted, Porteñita: el amor, se hace día a día. Como los pasos se dan uno tras otro. Y los escalones se suben de a uno.
También se pueden subir de dos en dos o de cuatro en cuatro (según la extensión de sus piernas que, si son como las de la foto, son tan largas que le llegan hasta el suelo). Ahora eso sí, cuantos más escalones, más riesgo de caerse.
Ahora las malas: éste es un mundo básicamente inseguro, de modo que tendrá que convivir con la inseguridad hasta el último día de su vida.
No tema, uno se habitúa y nuestro país, ayuda a crear anticuerpos.
Y su familia, si me permite una opinión, además de muy bien reflejadas las motivaciones por usted, es el producto de décadas de cambio de valores morales. Ese período de la historia de la humanidad, dejó un tendal.
¿Qué puedo desearle sino suerte en su relación con Nacho?
Mis respetos,

El Profesor